La primera pregunta y más importante, ¿es recomendable realizar ejercicio?
Claro que si, está comprobado científicamente el beneficio de realizar ejercicio y mantenerse activo, no todos necesitamos ser atletas, para mantener un nivel de ejercicio aceptable, Parafraseando a George Sheehan, un escritor, Médico y atleta Todos somos atletas, algunos de nosotros sólo estamos entrenando con más regularidad.
Las 10 principales razones para realizar ejercicio:
1) Prolonga la vida
2) Aumenta tu calidad de vida.
3) Mejora la salud.
4) Ayuda a prevenir las enfermedades del corazón, y muchos otros problemas.
5) Reduce el estrés y la ansiedad.
6) Reduce tu peso acelerando tu metabolismo.
7) Aumenta tu autoestima y mejora tu vida sexual.
8) Disminuye la probabilidad de tener diabetes y trastornos metabólicos.
9) Disminuyen los riesgos de contraer cáncer.
10) Aumenta tu capacidad mental y mejora tu sentido del humor.
¿Se debe realizar una evaluación cardiovascular a todas las personas que realizan ejercicios, incluyendo los atletas?
NO, realizar una evaluación previa a iniciar un programa de ejercicios en forma masiva e indiscriminada pareciera no ser de utilidad, sería de costos incalculables. La probabilidad de detectar un problema cardíaco con la sola historia clínica y el examen físico es baja alrededor de un 2,5 a 6%. Si en la evaluación se incluye un electrocardiograma, ecocardiograma y prueba de esfuerzo aumentaría la probabilidad hasta un 40%, dependiendo de la experiencia del médico o especialista en detectar cualquiera alteración, por lo que hace, debido al bajo porcentaje que sea costo efectivo, es decir, muy costoso para detectar pocos casos.
¿A quién le debemos realizar una evaluación cardiovascular completa y exhaustiva antes de entrar a un programa de ejercicios?
Los 12 elementos para recomendar una evaluación médica en las personas que realizan ejercicios.
Someterse a un programa de entrenamiento físico intensivo bien en sea para competir o no, debe tomarse en consideración varios aspectos, pero los mas importante que deben saber que si presentan algún síntoma, tienen alguna enfermedad de base o una condición familiar se recomienda se evaluado por un especialista preferiblemente cardiólogo para la debida prescripción del ejercicio.
Las asociaciones de cardiología recomiendan que deban ser tomados en consideración 12 elementos, precio a realizar ejercicios vigorosos, especialmente los atletas. Estos son:
1) Dolor o molestias en el pecho.
2) Pérdida inexplicada de la conciencia (síncope) o síntomas de desvanecimiento (pre síncope).
3) Falta de aire o fatiga excesiva e inexplicable asociada al ejercicio.
4) Historia, antecedente o hallazgo previo de soplo cardiaco.
5) Elevación de la presión arterial.
6) Historia familiar de muertes prematuras (súbita, inesperada o de otra naturaleza) antes de los 50 años de edad debido a enfermedad cardíaca, en padres, hermanos o tíos.
7) Enfermedad cardíaca en parientes cercanos menores de 50 años.
8) Ciertas condiciones cardíacas conocidas en miembros de la familia como miocardiopatía hipertrófica (músculo cardíaco engrosado) o dilatada, alteraciones electrocardiográficas (síndrome de QT largo o canalopatías), síndrome de Marfan o arritmias
9) Detección de soplo cardíaco en el examen físico.
10) Disminución de pulso en arteria femoral para descartar dilatación de la aorta (coartación de la aorta).
11) Estigmas físicos de síndrome de Marfan.
12) Medir la presión arterial.
Los que resulten positivo en cualquiera de esos 12 puntos, ameritaría una evaluación completa con electrocardiograma, ecocardiograma y prueba de esfuerzo, de resultar negativo, se autorizaría iniciar el programa de entrenamiento, de lo contrario ameritaría más estudios y la autorización para realizar cualquier programa de ejercicio dependerá de cada caso en particular.
¿Los pacientes con enfermedad cardíaca pueden realizar ejercicios vigorosos o competitivos?
Si, depende del tipo de condición que presente el paciente, su médico cardiólogo, después de evaluar exhaustivamente e indicar un tratamiento específico, determinaría el tipo de deporte a realizar, el modo de entrenamiento y las cargas progresivas, es por eso que el paciente con enfermedades cardiovasculares, no deberían ingresar, ni realizar ningún programa de ejercicio, sin la prescripción de su especialista tratante.
¿Cómo es el entrenamiento y la prescripción del ejercicio en atletas y pacientes con determinada enfermedad cardíaca?
La prescripción del ejercicio en pacientes atletas competitivos y en pacientes con determinada enfermedad cardiovascular, es más similar de lo que se podría pensar, pero mayor es el reto, cuando los pacientes con enfermedad cardiovascular desean participar en ejercicios vigorosos o deportes competitivos.
Hay dos principios básicos para establecer un programa de ejercicio. El entrenamiento específico que se refiere al modo de realizar los ejercicios y la carga progresiva (duración, intensidad y frecuencia del entrenamiento).
Los elementos a que deben tomarse en consideración son la capacidad aeróbica, capacidad y resistencia anaeróbica, fuerza y resistencia muscular. Estas evaluaciones se realizan en pruebas especiales bien sea en banda, bicicleta o piscinas artificiales con equipo especial para medir el consumo máximo de oxigeno y poder así indicar y hacerle seguimiento.
¿Existe una manera práctica para saber cuál es la intensidad máxima y la frecuencia del ejercicio?
Si, puede hacerse en forma practican para saber cuál es la frecuencia cardíaca que debe alcanzar y tratar de no sobrepasar al realizar ejercicios. Es una fórmula es sencilla de realizar y todos los que realizan ejercicio deberían conocerla. Se calcula restando la edad a un valor establecido que es 220 (frecuencia cardiaca máxima), y a ese valor se le calcula el 85%, el resultado sería el nivel máximo de la frecuencia cardíaca al realizar su programa de ejercicio. Por ejemplo, para una persona de 40 años sería:
220 – 40 = 180, el 85% de 180 (180 x 0,85) sería 153 latidos/min.
En cuanto a la frecuencia recomendada para la mayoría de los atletas de resistencia es, como mínimo, 5 días por semana. Sin embargo, muchos entrenan siete o más veces en una semana. Obviamente, este último Puede requerir más de un trabajo en un día, que es bastante común en los nadadores y atletas de pista.
¿Es necesario el uso de entrenamiento con pesa o entrenamiento de resistencia para el rendimiento atlético?
Ciertamente, está bien documentado que el entrenamiento de resistencia aumenta la fuerza y masa muscular necesaria para el ejercicio, sobre todos los de competencia. A diferencia en este tipo de entrenamiento es que puedes focalizarte sobre un musculo específico o grupos musculares.
¿Cuáles son los tipos de programas de entrenamiento?
Los programas de entrenamiento pueden ser agrupados en grupos:
1) Entrenamiento por intervalo: Son series de Ejercicios repetidos, alternados con períodos de menor intensidad bien sea de leve intensidad o de moderada intensidad.
2) El Fartlek: Es una palabra sueca que significa juego de la velocidad. Es un sistema de entrenamiento que consiste en hacer varios ejercicios, tanto aeróbicos como anaeróbicos, principalmente ejercicios de carrera, caracterizados por cambios de ritmo realizados a intervalos. El Fartlek fue desarrollado por el entrenador sueco Gösta Holmér y posteriormente fue adoptado por muchos fisiólogos. De las muchas variedades que se practican una de las más popular es el Fartlek polaco, un tipo de Fartlek desarrollado en Polonia por Jan Mulak y otros entrenadores siendo un sistema más sistematizado en el que se divide el tiempo en 4 fases: calentamiento, series sobre distancias cortas, series sobre distancias largas y recuperación. Incluye juegos de velocidad en que los individuos corren a través de bosques, playas, por la ciudad, por un pueblo o en campo abierto moviéndose con libertad en medio de la naturaleza. El individuo se mueve por instinto, cambiando la velocidad, la intensidad y el volumen a su propio gusto. El entrenamiento Fartlek debe ser empleado no más de una vez por semana. La duración de los períodos de ritmo más rápido y lento no está predeterminada, y todos los ejercicios se realiza de forma continua.
3) En base al tiempo: La programación del ejercicio y su intensidad de rige en base a períodos de tiempo preestablecidos.
¿Cómo sería el programa de entrenamiento en el paciente atleta?
El paciente que es atleta ya ha sido sometido a pruebas de detección, correctamente diagnosticado, se le hacer la prescripción del ejercicio y está en continua evaluación y seguimiento. No todas las enfermedades del corazón son las mismas, no todos los deportes competitivos requieren el mismo nivel de esfuerzo. Si se determina que un atleta no debe participar en un nivel vigoroso, debe mantenerse un nivel de del ejercicio acorde a su enfermedad, que realice en forma regular, controlando los factores de riesgo, para prolongar la vida y mejorar su calidad de vida.
La prescripción de un atleta competitivo debe tener en cuenta una única variable que es el tipo de enfermedad cardiaca presente. Aunque suele ser fácil de aconsejar a un atleta para vigilar y mantener un cierto nivel de intensidad durante entrenamiento, el clínico debe asumir que el atleta alcanzará el máximo o casi máxima intensidad durante la competición. Por último, los atletas pueden someterse a cirugía o tienen dispositivos insertados como tratamiento para su enfermedad cardiaca subyacente, cualquiera de las cuales puede alterar la prescripción del ejercicio.
Las pruebas de esfuerzo son especialmente útiles Permite al clínico evaluar las respuestas cardiovasculares del atleta durante el esfuerzo. Si se realiza una prueba de esfuerzo, el protocolo puede modificarse para simular la actividad del deporte.
Las 7 consideraciones en el paciente atleta con enfermedad cardíaca:
1) Identificar la enfermedad cardíaca presente.
2) Asumir un esfuerzo máximo o casi máximo durante la competición.
3) Los atletas no siempre saben cuándo exceden los límites de seguridad.
4) Identificar los medicamentos que están tomando y determinar qué influencia puede tener en la respuesta al ejercicio.
5) Identificar si el atleta ha tenido corrección quirúrgica.
6) ¿Tiene el atleta un marcapasos o un implante automático Cardioversor / desfibrilador?
7) ¿El atleta tiene síntomas o signos hemodinámicos que comprometan su vida?
